El tocino ahumado tiene una textura nítida y un sabor ahumado y salado. A menudo se usa para agregar sabor y textura a platos como papas, frijoles, tortillas y quiches. También se puede usar para cocinar carnes y verduras. El tocino ahumado es rico en grasas saturadas y colesterol, y puede contener una gran cantidad de sodio. Por lo tanto, se recomienda consumirlo con moderación y elegir versiones de sodio aligeradas si está en riesgo de enfermedad cardiovascular.